Buscar en este blog

jueves, 6 de septiembre de 2018

Con Sevilla a cuestas: Cartagena


Con esta entrada quiero comenzar una nueva serie de entradas que iré haciendo poco a poco, según los viajes que pueda ir haciendo. Y es que, como supongo que cualquier enamorado de su ciudad, no puedo evitar comparar los sitios que visito con Sevilla, y fijarme en las referencias sobre la misma que puedo encontrar o cosas en común entre ambas ciudades. Aunque lo llevaba pensando hace tiempo, no ha sido hasta ahora cuando me he decidido a compartir estas impresiones, ya que, además de los detalles curiosos que encuentro en estas ciudades relacionados con Sevilla que pueden ser interesantes, hay otros nexos, reflexiones o comparaciones que creo que pueden ayudarnos a comprender mejor nuestra propia ciudad, su historia y por qué es como la conocemos hoy en día.

Sin más dilaciones, presento la ciudad con la que voy a comenzar esta serie: Cartagena. Esta ciudad costera murciana posee una riquísima historia que se puede recorrer desde sus inicios cuando visitas la ciudad actual. Fundada en el 227 a.C. con el nombre de Qart Hadasht por los Cartagineses como estrategia de expansión tras la derrota contra los romanos, pronto fue conquistada por el imperio romano, tras la segunda guerra púnica, concretamente en el año 209 a.C.

Es en la época romana cuando la ciudad, rebautizada como Cartago Nova, con el título de Colonia, vive su etapa de mayor esplendor. De esta etapa quedan muchísimos restos, varios de ellos visitables, entre los que destacan dos de los monumentos más reconocidos de la ciudad: el antiguo teatro y el barrio del foro.
Teatro romano de Cartagena