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lunes, 10 de octubre de 2022

Reapertura del Convento Madre de Dios: una oportunidad para asomarse a los tesoros de la clausura

El Convento Madre de Dios, en la calle San José, acaba de reabrir tras un periodo de restauración, dirigida por el arquitecto Ángel Candelas, que ha afectado principalmente a la estructura del edificio. Es por ello que la orden necesita conseguir más dinero para proseguir con la restauración del interior del edificio y sus bienes inmuebles, ya que la iglesia sigue estando visiblemente necesitada de estas intervenciones. Por ese motivo se ha abierto la exposición, cuya recaudación irá íntegramente destinada a estos fines. Se va a buscar también la ayuda del ayuntamiento, que ya colaboró con los trabajos anteriores. En la citada restauración, además de obras complejas como la estabilización de las cubiertas mediante la construcción de una estructura que soporta a la original y el acabado en forma de cubierta microventilada, se han restaurado también las fachadas exteriores, recuperando unas policromías que decoraban la portada de Juan de Oviedo del año 1590.

Interior de la iglesia del Convento Madre de Dios de Sevilla

Portada de la iglesia del Convento Madre de Dios, con restos de policromías originales

El Convento Madre de Dios es un convento de la orden Dominica que se fundó en 1472 en las inmediaciones de la Puerta de Triana, aunque se traslada en 1496 a su ubicación actual, junto a la Iglesia de San Nicolás, por las inundaciones que afectaban al primitivo emplazamiento. Este traslado fue posible gracias a la donación, por parte de la Reina Isabel, de unas antiguas propiedades judías, incluida una Sinagoga, que se convertiría en el primitivo oratorio. La obra del templo actual, con la típica planta de cajón de los conventos sevillanos, se finalizó en la segunda mitad del siglo XVI, combinando los estilos renacentista (visible en elementos como los retablos laterales y las yeserías) y el mudéjar. En este sentido, destacan las armaduras, que son de las mejores que se conservan en la ciudad, y en Andalucía. Llama la atención la armadura que cierra la capilla mayor, construida en 1564, que está dotada de unas vistosas policromías.

Armadura mudéjar que cubre el presbiterio de la iglesia

Esta capilla la preside un retablo barroco hecho entre 1702 y 1704, tras recibir la orden una generosa herencia que le llevaría a efectuar diversas reformas. Sin embargo, se conservan en el mismo algunas de las esculturas de Jerónimo Hernández que ocupaban el primitivo retablo, como la Virgen del Rosario, el relieve de la Última Cena o el conjunto del Calvario. Tanto el presbiterio como el arco toral están además decorados con pinturas murales barrocas de Lucas Valdés. En el resto de la Iglesia sólo se han encontrado en las catas realizadas pinturas murales en algunos elementos concretos como la puerta de entrada al coro, así como restos de dorado en las yeserías. En el presbiterio destacan además sepulcros de familiares de Hernán Cortés, patrocinadores de la misma, que responden a la autoría de Juan de Oviedo.

Restos de dorado hallados en las catas en las yeserías

Los laterales de la Iglesia se completan con varios retablos renacentistas del siglo XVI. Mención especial merece aquí la azulejería, de finales del mismo siglo, que se trata de uno de los primeros conjuntos en la ciudad que recupera las técnicas de policromía a modo de lienzo introducidas por Niculoso Pisano. De todas estas cerámicas, la más destacada es la que cubre la mesa del altar del retablo de San Juan Evangelista. Esta azulejería, que reproduce una escena del apocalipsis, ha sido atribuida a Cristóbal de Augusta a finales del siglo XVI. Sin embargo, toda la azulejería de la iglesia, a pesar de su riqueza, está en un muy deficiente estado de conservación. Son de hecho los elementos que más denotan la necesidad de una restauración completa que todavía no ha llegado.

Otro hecho a destacar es que la iglesia conserva, casi íntegramente, la solería de barro original, incluyendo algunos detalles de cerámicas decorativas. Esto es algo especialmente interesante porque es muy difícil encontrar iglesias que conserven estas solerías originales que tan frecuentes eran en la ciudad.

Retablos renacentistas del lado del evangelio

Capilla con yeserías y azulejería renacentistas en el lado de la epístola

Panel de azulejos del siglo XVI con motivo del apocalipsis bajo el retablo de San Juan

Solería cerámica original en el interior de la iglesia

La citada exposición permite acceder al coro bajo, donde destaca la original armadura de madera y algunos elementos como las policromías o una imagen mariana de Lorenzo Mercadante de Bretaña (autor de las esculturas de las portadas de la Catedral). El antecoro acoge además un interesante resucitado renacentista de Jerónimo Hernández.

Coro bajo del convento Madre de Dios desde el interior

Antecoro presidido por el resucitado de Jerónimo Hernández

Coro bajo del Convento Madre de Dios

Ya en el coro alto es donde se encuentra la exposición propiamente dicha, que hace un repaso por la historia del convento a través de una serie de piezas, paneles informativos, planos originales, etc. Además, la visita cuenta con una audio-guía que te sumerge en la historia y te presenta "testimonios en primera persona" de personajes históricos que fueron importantes para el convento. Destaca, por ejemplo, la Reina Isabel, que según dice se ha dicho históricamente se alojó en este convento en su visita a Sevilla. Aunque no han llegado a nuestros días documentos originales de la época que lo atestigüen, la historia dice que se mandó retirar de la habitación en la que se iba a alojar la reina una viga que incluía unas alabanzas a Alah en epigrafía árabe. En la exposición se expone un fragmento de viga con estas características que se conservaba en el convento, lo cual apoya la posible veracidad de estas hipótesis.

En la exposición se presentan también diversas obras valiosas del convento, como una preciosa piedad de Cristóbal Ramos (S.XVIII) o un San Juan Bautista de Juan de Mesa, entre otras muchas piezas. Hay hueco incluso para algunas obras de arte contemporáneo.

Vista de la Iglesia a través de la celosía del coro alto

Exposición en el coro alto 

Exposición de piezas escultóricas. En primer plano la Piedad de Cristobal Ramos y en segundo el San Juan de Juan de Mesa

Esta exposición estuvo abierta entre octubre y abril de 2022, y desde entonces no se ha vuelto a abrir al público el convento, más allá del acceso a la iglesia en el horario de culto.

Fuentes:
- Asemas (2022). Convento Madre de Dios de Sevilla: una nueva cubierta ventilada para un templo con siglos de historia. Asemas. https://stepienybarno.es/blog/2022/06/09/convento-madre-de-dios-de-sevilla-una-nueva-cubierta-ventilada-para-un-templo-con-siglos-de-historia/

- Becerra, J. (2012). Convento Madre de Dios de la Piedad. Leyendas de Sevilla. http://leyendasdesevilla.blogspot.com/2012/04/convento-madre-de-dios-de-la-piedad-i.html

-Lupión Álvarez, J.J., Arjonilla Álvarez, M., Ruiz Conde, A., Sánchez-Soto, P.J. (2006). Frontal de altar y paneles cerámicos del siglo XVI en la Iglesia del Convento Madre de Dios (Sevilla): estado de conservación y reconstrucción virtual. Boletín de la Sociedad española de Cerámica y Vidrio, 45, 305-313

- Roldán Salgueiro, M.J. (2010). Iglesias de Sevilla. Almuzara.

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